Cuando una o más
personas son agredidas en su actividad profesional, laboral o personal por otra o un grupo
especifico, interviene el mecanismo de defensa propio de esta situación,
el fuerte tiende a defender al débil, en algunos casos , los pocos ,
desinteresadamente en otros por algún interés, los mismos que pueden
ser internos y externos . El efecto Paraguas, busca darnos una idea del aprovechamiento oportuno por las
partes involucradas directa como
indirectamente, de actuar con intereses
diferentes en objetivos comunes.
Interno.- Cuando
los familiares , su medio y/o su entorno laboral directo
apoyan su defensa y participan
activamente en la defensa del mismo,
de acuerdo a la cultura organizacional, social
o individual y hasta el
nivel que puedan llegar ,factor
del que dependerá el resultado positivo o negativo de la situación en cuestión
.
Externo.- El medio de acuerdo a sectores o total, conforme a intereses de conveniencia,
verdaderos o no, (Comercial, político o
social) apoyan al agredido o agredidos , buscando debilitar a la parte agresora ,
tomando esta situación como propia ante
el medio , tratando por este camino
de debilitar al agresor y salir fortalecido
directa o indirectamente, buscando
dominar en su objetivo real , lo que
sería considerado como la
oportunidad perfecta.
Esta situación es determinada en mayor o menor
proporción por la imagen desarrollada por el agredido o agredidos en el transcurso de su desarrollo
vivencial, laboral, profesional o por
circunstancias de interés de terceros por ser el momento oportuno.
Ambas
situaciones del aspecto Interno como externo, se dan poniendo como punta de
lanza la
correcta aplicación de la Ética y Valores, actitudes que posiblemente en
la gran mayoría de casos nunca existieron, pero ahora son el perfecto pretexto para
conseguir el objetivo deseado.
Claro está, si es que el agredido o agredidos deciden
abrir su causa buscando defensa y
la misma pueda ser de interés.
Mag.
Dante Arboccó Quesada
Asesor
Empresarial
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